García Luisa, Crónica sobre un partido de fútbol, un concierto o una tarde de hospital

El manizalita que busca llegar a cada rincón del país con su arte

Dulce Tour On: Sebastián Yepes plasmado en música y arte

Quiere respirar hasta su último día de la música

 

Por Luisa García Silva

Sebastián Yepes es un manizalita que nació el 10 de junio de 1980, 12 de estos años han sido dedicados de forma profesional a la música, pero desde muy pequeño su vida fue como un son, una melodía. Él se resume en sencillez, dulzura, carisma y “parcería”, como lo llamaría él a ser amiguero, de ahí el por qué su último álbum discográfico “Dulce” lo define, pues condensa su vida, su estilo y su esencia, en este se ve un renacer de su música, el madurar como persona y como cantante.

 

El sueño de “Dulce Tour On” nace cuando Sebastián decide recorrer aproximadamente de 30 a 35 ciudades del país para ser conocido de cerca por su público y llevarles su nuevo trabajo. Es por esto que junto a su hermano Juan Yepes y su agrupación, crean una travesía que inicia en la fría y acogedora capital de Colombia, en la cual realizan su primera presentación el 12 de julio del 2014 en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo donde se muestran las máximas expresiones de arte en el país. Esa noche Sebastián quiso dejarla para la historia, tanto fue que decidió grabar un DVD que se llamaría “Dulce Tour-On en vivo” donde se plasma esa primera noche en el magnifico teatro.

 

Después de 271 horas de ensayos y tres meses de pre-producción, junto a 33 instrumentos que interpretaron al son de 33.200 acordes las 16 canciones que mezclaban su nuevo disco y sus emblemáticas canciones y también, como olvidar a los 1100 fans que nos encontrábamos en el recinto y a los artistas que nos deleitaron con su música como Rakel, Esteman, Fonseca y Felipe Bravo de Superlitio.

 

En esa noche, en medio de las luces veo aparecer desde del lado derecho del escenario a Sebastián Yepes, quien nos saluda con una venia y una sonrisa un poco tímida como las que lo caracterizan; pero el hielo lo rompe como suele hacerlo al ritmo de su música, en este caso inicia al son de “Llego el momento por el que tanto tiempo pude esperar…” nada más y nada menos que la canción Dulce, luego a un ritmo más misterioso que caracteriza a “Lo he probado todo” sus fans cantamos en coro “Es imposible, que no me duela despertar, y me persigue, a donde vaya tus recuerdos me persiguen…”.

 

Otro momento emblemático es cuando el ritmo de su música cambia a uno más animado y nos invita a todos los cuerpos a bailar y a cantar al mismo compás “Voy de unos brazos a otros mitigando mi dolor, perdón, mi cuerpo no responde si no respira tu olor…”. Después, en menos de un segundo, la mamá de Sebastián aparece en el escenario en forma de melodía de “Mis Huellas en tus manos”  que resume lo esencial que es para todos nuestra madre “El tiempo que me has dado es mi mas grande regalo, cuando hasta ahora nada ha sobrado, cuando te ha quedado poco aquí”.

 

El escenario se transforma y viaja rápidamente en el tiempo cuando los clásicos de Sebastián junto a Sanalejo, la agrupación a la que le debe su inicio, llegan a la tarima y donde al son de “Me gusta”, “Mujer Calavera”, “Barman” e “Indeleble”, que dice más o menos así “Trato de dejarte congelada en un recuerdo que termina helándome, tal vez son las cicatrices la bitácora reciente hasta ahora, sin darme cuenta te materializo en frases sueltas que terminan ahogándome…”, se toman nuestra memoria y los cantos de todos nosotros quienes junto a él recitábamos cada una de estas inolvidables estrofas.

 

Después del viaje en el tiempo, Sebastián decide traer en ese momento a la tarima en forma de recuerdo a su abuela, en ese preciso instante “Elvia” toma el protagonismo en las tablas y surge  de su guitarra la melodía dulce y acogedora que él describe así “Pienso que Elvia era la indicada para sellar con broche de oro el concierto, es una canción instrumental con un ritmo único y espontaneo, es dedicada a mi abuela con la que le aprendí a tenerle amor a la música y la vida. Recuerdo cómo a diario me pedía que le tocara algo para entretenerla. Después de su fallecimiento, un día cualquiera tomé mi guitarra y pensando en ella comenzaron a salir las notas que componen esta hermosa y significativa pieza”.

 

Así finaliza su gran hazaña de “Dulce Tour-On en vivo” donde con orgullo, nostalgia y brillo en sus ojos se muestra en cuerpo y alma como nunca a sus fans, además, la satisfacción que tuvimos cada uno de los asistentes del evento ante esta significativa presentación.